El resultado ajustado del 1o turno y el avance del bolsonarismo encendieron la luz amarilla para los estrategistas de la campaña de Lula. Pero la respuesta ha sido más de lo mismo: ampliar las alianzas con los políticos y partidos burgueses, y ceder aún más a las presiones de moderación de la campaña, como el retiro del color rojo de las calles, exigido por Simone Tebet y los “influencers de lujo” de la Red Globo.
No obstante, el cambio de la camisa roja por una blanca no está trayendo más votos para Lula. Por el contrario, la pérdida de identidad política del PT puede llevar a perder votos y no ganar. Hoy, a menos de dos semanas del 2o turno, a pesar de la ampliación del “frente Amplio” con la burguesía y de la moderación del discurso para “atraer a los electores del centro”, la elección sigue indefinida.
Desde el inicio del proceso electoral, el GOI-Palabra Obrera, viene alertando que el mayor obstáculo para la victoria de Lula son sus alianzas con la burguesía. Afirmamos que estas alianzas con políticos y partidos descompuestos, ya desprestigiados delante de la población, como el MDB, de Tebet y Temer, el PSDB, de FHC y José Serra, el PSB, de Alckmim y Francia, etc., no traen votos para Lula. En verdad, estos aliados obtienen más que ganar votos para Lula.
Sabemos que la gran mayoría de las trabajadoras y de los trabajadores que apoyan a Lula y al PT no tienen acuerdo con nuestra exigencia de que Lula rompa con la burguesía, pues confían que la política de colaboración con los patrones es la única salida para derrotar a Bolsonaro.
Sin embargo, la realidad nos va dando la razón. Y eso puede ser demostrado por los números de la elección hasta ahora. El grafico de abajo, del Agregador de Encuestas del diario O Estado de Sao Paulo, que hace una síntesis de las encuestas realizadas por los diversos institutos, da una imagen de lo que queremos demostrar.
Obsérvese que en abril Lula tenía el 61% y Bolsonaro el 39% de la intención de voto. Desde que fue acordada la alianza con Alckmim y otros figurines burgueses, en el inicio de agosto, la ventaja de Lula fue disminuyendo hasta llegar al resultado final del 1o turno de 48,4% a 43,2%. Esta es una prueba irrefutable de que el “frente Amplio” con Alckmim y los representantes de la patronal llevaron a Lula a perder votos y de nada servirán para frenar el avance de Bolsonaro. Esto vale también para el 2o turno.
Las exigencias de Tebet y de la Globo, de “blanqueamiento” y moderación de la campaña buscan amenizar aún mas el programa y el discurso de Lula para atraer a los sectores de “clase media” y de la pequeña-burguesía que votaron la fracasada 3a vía en el 1o turno. Pero la decantación de estos votos ya se consume, y poco altero la correlación de votos entre Lula y Bolsonaro. Entonces, donde buscar más votos para Lula?
La respuesta ha sido dada por los miles y los miles de activistas de base de la campaña de Lula, que redoblaron sus esfuerzos en las últimas semanas.
Contrariando las orientaciones de los aliados burgueses de Lula, las manifestaciones siguen inundando las calles de rojo y avanzando para las periferias, favelas y asentamientos de las grandes ciudades, como el ejemplo del Complexo do Alemão, en Rio de Janeiro, y de Sao Mateus, en la zona este de Sao Paulo, en lugar de ir para los rincones de los interiores y zonas rurales como quieren Alckmim, Tebet y la Globo.
Este camino es impulsado por las y los activistas de base y que están haciendo avanzar la campaña en el 2o turno.
La campaña de Lula tiene que buscar votos en los sectores de la clase trabajadora que se abstuvieron y no fueron a votar en el 1o turno, cerca del 20% del electorado. Y debe dialogar con la juventud proletaria desempleada y precarizada, donde Bolsonaro aún tiene muchos votos.
Para ganar estos votos, además de centrar la campaña en las periferias de las grandes ciudades, es preciso que Lula asuma compromisos concretos con la mejoría de las condiciones de trabajo y de vida del pueblo pobre y trabajador, a comenzar por los problemas más sentidos por la juventud proletaria:
Derechos laborales para todas y todos: Lula debe comprometerse con la Derogación de la Reforma Laboral y de la Reforma Jubilatoria, con la restauración de los derechos laborales y jubilatorios de la CLT y de la Constitución de 1988, y con la extensión de estos derechos para todas las trabajadoras y trabajadores precarizados e inmigrantes.
Para enfrentar el desempleo Lula debe comprometerse con la reducción de la jornada de trabajo para 6 horas, sin reducción de salarios y derechos, y con un Plan de Obras Públicas, a través del cual el gobierno contrate millones de desempleados para construir viviendas, hospitales y puestos de salud, escuelas y guarderías, líneas de metro y de trenes, redes de agua y saneamiento, manutención de las vías públicas y otras medidas sociales en beneficio de la población.
Para valorizar los salarios frente a la inflación, Lula debe comprometerse a doblar el valor del salario mínimo e implantar el reajuste mensual del salario de acuerdo con la inflación.
Estas son algunas de las medidas de emergencia necesarias para proteger al pueblo trabajador de la crisis capitalista, que van a priorizar el interregno electoral (vea el programa complete propuesto por el GOI-Palavra Operária)
Sin embargo Lula se rehúsa en asumir un programa de verdaderos cambios para el pueblo pobre y trabajador, pues se somete a los estrechos límites impuestos por los patrones, que exigen que el mantenga las reformas anti-pueblo de Temer y Bolsonaro, que respete las leyes antisociales de responsabilidad fiscal y del techo de gastos, que mantenga los pagos billonarios de la deuda pública a los bancos y especuladores, garantizando los beneficios astronómicos y la transferencia de los recursos públicos para los grandes empresarios.
Solo rompiendo su sumisión y sus alianzas con la burguesía será posible para Lula avanzar a la victoria en el 2o turno.
Esto debe ser exigido de Lula y del PT por las y los miles de activistas que están impulsando la campaña en la base. Que Lula gobierne sin patrones !! junto con los sindicatos y movimientos de lucha de la clase trabajadora.
Nota del GOI (18//10/2022)
[Imagem: Lula en el Complexo do Alemão, Rio de Janeiro, foto de Ricardo Stuckert]